¡Tengo Twitter y no dudaré en usarlo!

¡Benditas redes sociales! Gracias a ellas hemos podido descubrir el lado más oscuro, gracioso o insospechado de algunos de los personajes públicos más notables de nuestra sociedad. Gracias a redes como Twitter, muchos políticos, cantantes o deportistas han quedado en evidencia en más de una ocasión. ¿Son realmente conscientes estos personajes del impacto que puede tener una declaración desafortunada, un comentario a destiempo o una metedura de pata antológica?

Afortunadamente (para nosotros) y gracias a la posibilidad del "pantallazo", es posible inmortalizar mensajes que han sido borrados por sus autores para dejar constancia de sus frases lapidarias. 

Si hay un colectivo que es mirado con upa por la comunidad tuitera, esos son sin duda nuestros políticos. Uno de los que más ha dado que hablar fue el inigualable Toni Cantó. El aún militante de UPyD tiene el dudoso honor de ser uno de los personajes públicos más polémicos. Como ejemplo, una de sus "perlas": 

El actor valenciano siempre ha tratado de llevar en persona su cuenta de Twitter hasta las últimas consecuencias. Mientras que otros cargos políticos delegan su mantenimiento de contacto con el pueblo llano a un Community Manager, Cantó tuitea en persona... y con qué resultados. 

Su fama de tuitero ha sido empleada para protagonizar algunas bromas que poco o nada tienen de gracioso. Hace dos años, se suplantó su identidad para publicar un falso tweet en el que equiparó una manifestación en Oviedo en favor del dialecto asturiano con movimientos proetarras. Éste fue el tweet de la discordia:

Las reacciones no e hicieron esperar y el propio actor tuvo que salir a desmentir su autoría. 

Casos como el de Toni Cantó deberían servir de ejemplo de lo que no se debe de hacer si se es un personaje público. Todo lo que se dice en la redes sociales tiene un impacto casi inmediato y puede ser guardado en la hemeroteca para dejarnos en evidencia en cualquier momento.